El papa Francisco celebrará el próximo 28 de marzo, Jueves Santo, la misa vespertina de la Cena del Señor en un centro penal de menores y no en la Basílica de San Juan de Letrán, como ha sido habitual, informó ayer el Vaticano.

En la ceremonia, que se desarrollará en el centro penal de menores de la localidad romana de Casal del Marmo, se realizará el ritual del lavatorio de pies, imitando lo que Jesús hizo a sus apóstoles, por lo que el Papa lavará con agua los pies de doce jóvenes recluidos.

El Papa argentino sorprende así con la nueva decisión, ya que hasta ahora el Jueves Santo se celebraba por la mañana con la misa Crismal en la Basílica de San Pedro y por la tarde la misa de la Cena del Señor en la Basílica de San Juan de Letrán. El resto de las celebraciones de Semana Santa, agregaron, se desarrollará  tradicionalmente y se dará detalles en los próximos días.

Francisco se reunió ayer con el argentino Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz, quien reiteró que el flamante pontífice “no tuvo nada que ver con la dictadura” militar argentina y “no fue cómplice” del gobierno de facto.

En tanto, dos días después de la inauguración oficial del pontificado de Francisco en Roma, los anglicanos entronizaron ayer, en la catedral de Canterbury, Reino Unido, a su nuevo jefe espiritual, Justin Welby, un ex empresario que ingresó tardíamente a la religión y hereda una Iglesia llena de cuestionamientos.

Francisco envió un saludo al nuevo líder espiritual de la Iglesia Anglicana, que es una rama de la Católica, pero está excluida de la autoridad del papa y considera al rey o la reina de Inglaterra como  la autoridad suprema. Su sede es Inglaterra y se estima que existen aproximadamente 70 millones de anglicanos distribuidos en  el mundo. AFP/EFE