Varios funcionarios del Consejo Provincial del Azuay fueron cesados en sus funciones. Los despedidos dicen no conocer las razones de su destitución, pero creen que fue por represalias al no haber participado en la última campaña política del prefecto, Paúl Carrasco.

Según el viceprefecto David Acurio, por el momento son 20 las personas que están fuera de la institución, “pero en los corrillos del consejo se dice que podrían ser al menos 40”.

Los denunciantes señalan que todos son funcionarios de carrera.
Acurio dijo que llama la atención esta forma de despedir a los trabajadores sin darles una   explicación. “Son personas que han laborado por años. No son de libre remoción. Es gente de planta y tiene nombramiento ganado bajo un concurso”, sostuvo. Según los afectados, el pedido de separación llegó de manera sorpresiva y, según ellos, ni siquiera les dieron oportunidad para sacar sus bienes personales de las oficinas. A Diego Macero le llegó  la notificación   el 28 de febrero firmada por  María Cecilia Vásquez, delegada del prefecto.

En el texto  dice “que se procede a notificar al Soc. Macero Vásquez Diego Vinicio  con la Acción de Personal N° 1061 de fecha 27 de febrero del 2013, la cesación de funciones por compra de renuncia con indemnización, de conformidad a lo que establece la letra k) del artículo 47  de la Ley Orgánica del Servidor Público...”. Señala que  cumplía las funciones de coordinador general del Área de Gobernabilidad, Planificación  y Participación. El sueldo del funcionario era de $ 1.676. Manifestó que lo llamaron y le anunciaron de una reestructuración y que él debía  abandonar el puesto. “Cuando fui a mi computadora ya estaba bloqueada”, dijo, al tiempo de señalar  que fue hasta la Dirección de Personal a pedir la Acción de Personal. Sostuvo que no ha compartido algunas cosas con el prefecto  y que eso generó algunos distanciamientos. “Yo comencé a vivir una situación conflictiva desde el año 2010 con Carrasco”, indicó.

Acotó que les pidieron  ayuda en la última campaña electoral.
“Lo hicimos. Estuvimos en las movilizaciones, en las caravanas, inclusive nos pidieron que vayamos a los recintos electorales a cuidar el voto”, indicó. 

Tania Barros manifestó que fue la primera persona despedida de la institución el 14 de enero al mediodía.

Agregó que un grupo de personas llegó hasta la casa de su padre para colocar publicidad electoral del movimiento del prefecto y hablaron en contra del Presidente.

“Mis padres lo que comentaron fue que no hay que desmerecer las cosas buenas que ha hecho el Mandatario”, expresó.

Barros indicó que a la semana de ocurrido el   hecho fue separada de su puesto. Cuando pidió explicaciones sobre las causas de su salida la única respuesta que le dieron es  “que se trata de una disposición del prefecto”. Acurio pidió explicaciones a Carrasco de estos hechos.

Este último habría respondido  que “lamentablemente se   toman   decisiones adoptadas en días pasados y ejecutadas  ayer”. “Ha sido necesario. Ha sido   difícil tomarla personalmente, pero  debo agradecer al personal que ha cesado en sus funciones, valoro sus capacidades y respeto el aporte”, dijo en un mail el prefecto.