Los recientes atentados y disturbios registrados en Jerusalén Oriental, en Cisjordania y en las comunidades árabes en Israel hicieron resurgir  el temor por la formación de una nueva intifada (rebelión palestina), aunque no todos limitan sus desplazamientos y prefieren desafiar al peligro.

Raheli, embarazada de 8 meses, renunció a subirse a lo que ella llama “el tren del miedo”, el tranvía de Jerusalén, cerca del que dos palestinos embistieron su vehículo  contra peatones causando cuatro muertos.

“La última vez que tomé el tranvía me quedé junto a la marquesina, lo más lejos posible de la carretera. Por mi cabeza pasaban las imágenes de un coche que se empotra o todavía peor, una explosión. Es demasiado estrés. Prefiero caminar”, contó apurando el paso por la calle Jafa.

Esta céntrica arteria comercial es peatonal desde la entrada en servicio del tranvía hace 3 años. Ahora las motos de Yasam, una unidad de élite de la policía israelí, la recorren sin parar, hasta varias veces por minuto.

Hay bloques de hormigón apilados alrededor de cada parada del tranvía para impedir nuevos ataques con coches. Varios dirigentes alertaron de que estos bloques constituyen “una confesión de miedo”.  

Cuando el tranvía sale del centro de la ciudad y entra en los barrios palestinos de Jerusalén Este anexionada, se vacía de repente. Los pasajeros israelíes se bajan y toman el autobús, por miedo al lanzamiento de piedras cotidiano en el tramo más conflictivo de la línea.

Yoni va leyendo un libro camino de la universidad hebraica. De pronto levanta la vista y se da cuenta de que casi está solo, pero sigue con la lectura, como si nada. “Esto es lo que quieren los palestinos: que vivamos con miedo”, comenta muy serio.

Alon Nissan, un militar israelí de alto rango, considera  que “los acontecimientos registrados evidencian  que ha comenzado el levantamiento popular del pueblo palestino”.

El pasado lunes, el portavoz del Movimiento de la Yihad Islámica Palestina, Yusef al-Hasayna, aseguró que “sin duda se iniciará la Tercera Intifada del pueblo palestino contra el régimen sionista y nadie podrá detener esta corriente”. Esta agrupación se ha reivindicado tres de los  6 ataques contra israelíes, registrados en un mes.   

El jefe adjunto del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (Hamás), Musa Abu Marzuq, consideró que la resistencia es la principal opción para defender al pueblo palestino ante las continuas agresiones y la ocupación del régimen israelí, destacó Hispantv.  

El gobierno israelí ordenó varias medidas de seguridad adicionales para enfrentar los disturbios en Cisjordania y Jerusalén Oriental.

La Primera Intifada contra la ocupación israelí ocurrió entre 1987 y 1993, y la Segunda en 2000; durante las 2 movilizaciones murieron al menos 6.200 palestinos.