Alepo.-

El operativo de evacuación del este de Alepo, ciudad devastada por la guerra en Siria, fue suspendido ayer después de producirse explosiones y disparos y que las partes en conflicto se acusaran mutuamente de violar la tregua vigente.

Fuentes de los rebeldes dijeron que milicias chiitas iraníes, aliadas del Gobierno de Damasco, abrieron fuego, mientras que la televisión estatal siria acusó a milicianos opositores de disparar contra las tropas gubernamentales.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó que la evacuación se detuvo sobre las 11:04 hora local después de que milicianos leales al presidente sirio, Bashar al Asad (foto), forzaran la suspensión en protesta por el incumplimiento del acuerdo alcanzado entre las partes.

Según la ONG, los milicianos son originarios de los pueblos de mayoría chiita de Fua y Kefraya, situados en la provincia vecina de Idleb y cercados por el Frente de la Conquista del Levante (antigua filial siria de Al Qaeda) y otros grupos.

Tras los bombardeos, los equipos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) fueron obligados a abandonar el área.

“Hace unos minutos la operación fue abortada. Nos pidieron a la OMS y al CICR que abandonemos el área con autobuses y ambulancias, aunque no nos dieron ninguna explicación”, señaló por teléfono desde Alepo la representante de la OMS en Siria, Elizabeth Hoff.

Las autoridades ordenaron a los civiles “que estaban desesperados por salir” que volvieran a sus casas, entre ellos habían “niños y mujeres”.

Miles de personas esperaban ayer ser evacuadas del este de Alepo en el segundo día del operativo iniciado en base a un acuerdo entre Rusia y Turquía.

Rusia afirma que 6.462 personas dejaron la zona, entre ellos 3.000 milicianos y 301 heridos. El Comité Internacional de la Cruz Roja dijo que 4.000 civiles abandonaron la ciudad.

El presidente estadounidense, Barack Obama, denunció ayer el “horror” que se vive en la ciudad de Alepo, señalando que Bashar al Asad no puede obtener legitimidad “a golpe de masacres”.

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, urgió a las partes involucradas en la guerra reanudar las evacuaciones. El organismo estudia el envío de observadores.

La guerra civil siria causó desde 2011 la muerte de más de 310.000 personas. (I)