El juez debe tener una conducta ética y moral irreprochable dijo el vocal del Consejo de la Judicatura (CJ), Fausto Murillo Fierro, al referirse al proceso de evaluación de los operadores de justicia de la Corte Nacional de Justicia (CNJ).

Esto deriva en la legitimidad y transparencia. En el caso de los jueces, su patrimonio, su consumo y sus gastos tienen que guardar coherencia con el ingreso que perciben, indicó.

Por eso analizarán los informes de las declaraciones patrimoniales de los 21 jueces y 16 conjueces de la CNJ, que los enviarán la Contraloría y la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE). Esto diferencia a las demás evaluaciones.

Murillo recordó que los jueces y conjueces tienen un período fijo de nueve años, pero cada tres años pueden salir por la renovación parcial. “En la actual evaluación, los funcionarios judiciales que no superen los 80 puntos serán removidos.

Explicó que el comité evaluador es un apoyo técnico. “Obviamente el reglamento establece que una vez cerrado el proceso evaluatorio, debe presentar un informe final al Consejo de la Judicatura”.

El Pleno de este organismo aprobará, decidirá y tomará la decisión definitiva, puntualizó.

También hay una comisión de veedores que acompaña al CJ desde que arrancó el proceso.

El vocal Murillo manifestó que hay un cronograma de trabajo establecido hasta finales de septiembre de este año.

Sostuvo que se quedarán los jueces que lo merezcan, los que se ganen el derecho a continuar en la Corte y así “tendremos una mejor administración de justicia, con fallos de calidad, precedentes jurisdiccionales, obligatorios y vinculantes y seguridad jurídica, que es lo más importante”.

Para cubrir las vacantes que dejen jueces y conjueces el Consejo llamará temporalmente a los mejores magistrados de las cortes provinciales del país. Posteriormente se convocará a un concurso ágil y transparente para llenar esos puestos, sostuvo Murillo Fierro. (I)