Mientras algunos empresarios-importadores locales piden revisar  (¿revertir?) las exigencias de calidad implementadas desde diciembre e, incluso, alertaban sobre un supuesto desabastecimiento en el mercado a raíz del anuncio gubernamental de la política de sustitución de importaciones, compañías extranjeras anuncian nuevas inversiones en el Ecuador. Donde los nacionales ven trabas, los extranjeros encuentran oportunidades.

El anuncio más reciente, que llamó la atención por su magnitud, fue el del presidente mundial de la transnacional estadounidense Coca-Cola, Muhtar Kent, que la semana pasada ofreció invertir en el Ecuador $ 1 000 millones en los próximos 5 años y otros $ 400 millones por parte de su socia Arca Continental que adquirió las industrias lácteas Toni. Incluso su idea es empezar a exportar desde aquí.

Si bien la inversión extranjera no es positiva per se, lo importante es que esos nuevos recursos se enmarquen en un tipo de inversión que aporte en términos económicos y sociales al país. Otras naciones de la región han demostrado que es posible incrementar la inversión extranjera en altos porcentajes, en sectores como minería, petróleo o en el mercado bursátil, pero sin generar mayor empleo, ni dejar sus ganancias en esos países. Muchas veces las divisas que salen son mucho mayores que las que entran. Por eso el Gobierno ecuatoriano se ha empeñado en incentivar un tipo de inversión que cree nuevas plazas de trabajo, que se enmarque en el objetivo de cambiar la matriz productiva para darle mayor valor agregado a los productos y que desarrolle nuevas industrias y servicios.

A pesar de que muchas cosas han cambiado en los 7 años del Gobierno de Rafael Correa, incluido el hecho de que la autoestima de los ecuatorianos se ha fortalecido, todavía permanece cierto complejo por el que solo se reconocen los logros nacionales cuando nos elogian desde el extranjero. Esa fue la sensación que dejó la visita de Kent. El directivo turco-estadounidense de la empresa que quizá es el ícono de Estados Unidos en el mundo felicitó al país por sus avances. Una vez que Coca-Cola dio su voto de confianza en Ecuador, ¿ciertos sectores seguirán hablando de que no existen condiciones para la inversión en el país?