Acaba edición 25 del festival de cine latino en Toulouse
La edición 25 del festival de cine latinoamericano Encuentros de Toulouse (llamado “Rencontres”, en francés) finalizó ayer en esa ciudad francesa con la proyección de las cintas premiadas, encabezadas por la guatemalteca “Polvo”, merecedora del galardón principal.
El largometraje, del realizador Julio Hernández, toma como hilo conductor la búsqueda de un grupo de desaparecidos durante la guerra de 1960 a 1996, para poner de relieve las graves consecuencias aún vigentes del conflicto armado en esa nación centroamericana.
Hernández había impresionado con anterioridad al jurado de Toulouse con sus películas “Las Marimbas del Infierno” y “Gasolina”.
Dentro de la categoría de documental logró el máximo premio “La eterna noche de las 12 lunas”, de la colombiana Priscila Padilla. Antes de iniciar el evento, la crítica había señalado a esta cinta como una de las favoritas en la competencia.
Calificada como una realización espléndida y sensible sobre la tarea universal de ser mujer, la cinta narra el ritual de la comunidad indígena Wayuu para preparar a una adolescente próxima a la pubertad en los deberes de futura esposa.
El premio al mejor cortometraje correspondió a Brasil, con la obra “O duplo”, realizado por Juliana Rojas.
La historia de ficción comienza cuando los alumnos de una escuela de primaria descubren en la calle a una mujer que es la doble de una de sus profesoras, quien a partir de ese momento sufre extrañas transformaciones en su personalidad.
Durante la jornada de ayer, las tres obras fueron proyectadas en diferentes salas de Toulouse, junto a otras que también se hicieron merecedoras de distintos reconocimientos en el festival.
Figuran entre ellas las producciones “Lágrimas”, del mexicano Pablo Delgado, quien obtuvo una mención especial, y “Joven y alocada”, de Chile, dirigida por Marialy Rivas, con el Premio del Público Joven, otorgado por el diario tolosano La Depeche du Midi.
La película cubano-venezolana “La piscina”, dirigida por Carlos Machado, recibió el premio Revelación de la crítica francesa, así como el reconocimiento entregado por el sindicato de trabajadores de la Energía Eléctrica y el Gas.
En la competición de Cine en Construcción, donde participan obras ya filmadas, pero sin editar y distribuir, los galardones fueron para la coproducción peruano-colombiana “Climas”, de Enrica Pérez, y “El verano de los peces voladores”, de la chilena Marcela Said.
Durante los 10 días que duró el festival se realizaron también numerosas actividades colaterales, como conferencias, encuentros con cineastas y escritores, debates, exposiciones y conciertos.
Con 25 años e igual número de ediciones, el festival de Toulouse está considerado como el mayor evento de cinematografía latinoamericana celebrado en Europa.
Ecuatorianas en Toulouse
Dentro de los filmes que formaron parte de la última edición del Festival de Cine Latinoamericano Encuentros de Toulouse, se encuentra la producción nacional “En el nombre de la hija”, de la cineasta cuencana Tania Hermida, que se exhibió el sábado 16 y el lunes 18 de marzo, como parte de la sección Panorama de ficción, fuera de competencia.
El año pasado el cortometraje “En espera”, de Gabriela Calvache, se exhibió en la sección Público joven.
Otros 2 filmes ecuatorianos se proyectaron en 2011: “Abuelos”, de Carla Valencia, en Panorama documental; “Domingo violeta”, de Ana Cristina Barragán, en Panorama Radar de cortometrajes.
En la edición de 2009, Mateo Herrera resultó ganador del premio Coep de Coeur (“flechazo”, en francés), con su película impulso, protagonizada por Cecilia Vallejo.
