Desde los años 60, los actos de violencia en la Universidad Central del Ecuador eran comunes. En la última década, el altercado más reciente se produjo en 2009 cuando un grupo de la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE), entonces liderada por el militante del desaparecido MPD, Marcelo Rivera, golpeó al rector Édgar Samaniego.

Algo similar ocurrió en 2005 en contra de León Roldós, exrector de la Universidad de Guayaquil y excandidato presidencial, cuando participaba de un acto público en el teatro de la Casona.

Con la posesión de Fernando Sempértegui, en enero de 2014, una de las consignas fue terminar con la violencia, despolitizar la universidad y enrumbarla como referente de  ciencia e investigación.

La noche del último jueves, esas prácticas se repitieron. Un grupo de estudiantes de Nueva Universidad y del Movimiento Mariátegui se enfrentaron en el interior de la sede de la FEUE. Varios resultaron golpeados y 3 de ellos con heridas severas. Una joven, de 26 años, recibió un corte profundo en su brazo derecho con un arma cortopunzante. Ayer fue operada y se recupera en una clínica de Quito.

¿Qué desató la pelea?

Carlos Muñoz presidía la FEUE  hace 2 años y, según consta en documentos universitarios, cesó sus funciones el 4 de junio de 2015, fecha en la que se posesionó formalmente en 2013.  El dirigente presentó un amparo constitucional para prorrogar sus funciones y debido a ello convocó, la noche del jueves, a los representantes de las facultades, que integran el comité ejecutivo, para discutir sobre las próximas elecciones y la  nueva conformación de la FEUE.

Los representantes habrían solicitado a Muñoz que presente el documento que avale su permanencia en el cargo, pero aparentemente no lo entregó en el momento.

Sobre las causas del incidente hay 2 versiones. Por un lado, Muñoz aseguró que alrededor de 20 personas irrumpieron en la reunión y empezaron a agredir a golpes a quienes estaban presentes. Incluso, afirmó que portaban cuchillos. “A grupos de la universidad, como ‘José Carlos Mariátegui’ y el MPD, no les conviene (llamar a elecciones), porque saben que no tendrán buenos resultados. Sabotearon la convocatoria”, sostuvo el representante de Nueva Universidad, quien sufrió una lesión en la mano y presentó una denuncia ante la Fiscalía.  

Por otro lado, militantes del Movimiento Mariátegui denunciaron que ellos fueron los agredidos. Alicia Maya, representante de la Facultad de Comunicación Social en la FEUE, afirmó que se trató de una emboscada. “Apagaron las luces, nos encerraron en la oficina y 7 u 8  nos golpearon a todos. A mí me patearon, me agredieron físicamente (...) En la universidad hay niveles de confrontación política”, reconoció la joven, quien habría identificado a los agresores y aseguró que no todos estudian en la universidad.

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Pamela Paredes, también del Movimiento Mariátegui, es una de las más afectadas. Tiene una herida en el brazo derecho. Según sus familiares, el corte fue profundo que comprometió los nervios y tendones de la extremidad.

La estudiante de Derecho detalló que vio cómo rompieron una ventana y le clavaron un vidrio en el brazo. Ella trató de protegerse del ataque y después de sentir un fuerte dolor se dio cuenta de que sangraba.

Daniel Vizuete, vocero de la Confederación de Estudiantes Universitarios y Politécnicos del Ecuador (Ceupe), comentó que parte de lo ocurrido podría tener su origen en los vacíos de la Ley Orgánica de Educación Superior sobre las representaciones estudiantiles. “En la ley dice que los estudiantes pueden agruparse libremente, pero no toma en cuenta que existían federaciones, asociaciones y grupos nacionales. Tampoco dice que, en caso de disputa, cuál es el organismo que debe regular”.

Aseguró que en varias universidades no hay federaciones. “Ya sea porque no han llamado a elecciones o porque el rector canceló la federación. Se ha pedido al consejo universitario que se pronuncie y ha  respondido que eso es autonomía de cada universidad, entonces ahí hay algunos temas que zanjar”, sostuvo.

¿Cuáles serán las medidas inmediatas?

El consejo universitario de la Central convocó a una reunión extraordinaria para analizar el suceso. La resolución, que fue leída por el rector Fernando Sempértegui, rechaza los actos de violencia y cualquier intento de transformar la universidad en un escenario de confrontación política.

Además, creó la comisión de asuntos disciplinarios que investigará el hecho durante un mes. Las indagaciones abarcarán no solo a estudiantes, sino también a docentes que participaron de la reunión. También se analizará la actuación de la guardia universitaria. La autoridad no ha confirmado si todos los implicados pertenecen a la Central.

Tras conocer el episodio, René Ramírez, presidente del Consejo de Educación Superior, aseguró que las decisiones deberán tomarse en el marco de la autonomía universitaria de la entidad. “Lamentamos que esto haya sucedido. Es la primera vez en 5 años. Queremos dejar atrás ese pasado caduco de la educación superior, de las universidades del garrote, de la violencia”, expresó el funcionario. (I)

DATOS

El rector de la Central, Fernando Sempértegui se reunió con dirigentes estudiantiles para escuchar sus demandas. Sobre el amparo que solicitó Muñoz dijo que esperan la notificación.

Al menos 30 estudiantes y miembros del Movimiento Mariátegui colocaron carteles cerca del rectorado. También elevaron consignas para rechazar la violencia.

La sede de la Federación de Estudiantes Universitarios amaneció con candado. En el interior se observaban vidrios rotos en el piso, escritorios caídos y papeles regados.

Tomás Quevedo, profesor de la Facultad de Comunicación Social de la Central de Quito, asistió a la reunión y resultó herido en el labio. Si bien reconoce que anteriormente pertenecía al movimiento Mariátegui, ahora dice que solo lo apoya. Estuvo presente para respaldar a las compañeras. (I)

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