Las protestas en la capital de la República han provocado daños materiales en edificaciones, viviendas, calles y aceras en diferentes puntos. Pero, sobre todo, en el Centro Histórico.

A esto se han sumado los intentos de saqueos, robos y asaltos, cierres de vías y amenazas a conductores por parte de supuestos manifestantes que les piden dinero para dejarlos circular.

La crisis se originó desde que los transportistas paralizaron sus actividades el jueves 3 de octubre de 2019, y después por la movilización indígena. Sin embargo, en las manifestaciones también se han escudado delincuentes, cuyas acciones han provocado daños a la propiedad pública y privada en toda la ciudad.

Según el balance preliminar del Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP), la afectación a las edificaciones del casco colonial y la reparación de las luminarias rotas hasta el momento suman $ 300 mil.

La entidad explicó que en los alrededores de la Plaza Grande, donde está el Palacio de Gobierno, unos 23 mil metros cuadrados de fachadas fueron pintadas con grafitis; 100 metros cuadrados de aceras destruidos y aproximadamente 10 calles dañadas.

Ese vandalismo ha causado alarma entre los habitantes de la capital, por eso se activó un Comité Cívico por la defensa de Quito. Este grupo se conformó con exalcaldes, exconcejales, asambleístas, empresarios, representantes gremiales, comerciantes, catedráticos, estudiantes y vecinos.

El presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Patricio Alarcón, recalcó durante la reunión que el comité ciudadano se autoconvocó motivado por la defensa de la capital ante la escalada de violencia de las últimas dos semanas.

A este encuentro también asistió el alcalde Jorge Yunda, quien se comprometió a adoptar las sugerencias que aporten los ciudadanos. Aclaró que el Municipio no tiene competencia para tratar los temas de seguridad, pero aseguró que presentó una denuncia en la Fiscalía para que los vándalos sean castigados.

El exalcalde de Quito, Roque Sevilla subrayó que con el pretexto de una protesta se agrede el patrimonio de la ciudad. “Falta de parte de la municipalidad una respuesta más firme”, señaló el exalcalde.

Tania Pazmiño, de la Cámara de Comercio de Quito, rechazó la violencia desatada no solo en Quito, sino en diferentes ciudades del país. “Tenemos que apoyar el progreso de Ecuador y las soluciones a la crisis deben tener un ambiente de diálogo, pero esto no justifica las agresiones contra la ciudad”, dijo.

Según ella, las medidas económicas adoptadas por el Gobierno son necesarias, pero “sí hay que sentarse a dialogar para discutir compensaciones para los sectores más afectados”, anotó.

Pablo Zambrano, presidente de la Cámara de Industriales, dijo que los capitalinos apoyan siempre la paz. También en una rueda de prensa, la ministra de Gobierno, María Paula Romo, y el concejal Bernardo Abad explicaron las acciones para normalizar las actividades en Quito y solicitaron la ayuda de los exalcaldes para ello.

Según la secretaria de Estado, han tenido algunos enfrentamientos violentos en Quito: personas que ingresaron con bombas molotov, picando paredes y veredas para usarlas contra la Policía. “Esperamos recuperar la normalidad en las próximas horas”, dijo. Agradeció la labor de la Policía y a quienes han difundido mensajes de paz y democracia. (I)