Ecuador, 29 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Plash recorrió 1.000 km de música en 3 ciudades

Desde la izquierda: Giss Chacón, Irene Rosenfeld, Kath Herrera y Elena Girjoaba, al pie de la discoteca La Gallera, en la ciudad de Tena.
Desde la izquierda: Giss Chacón, Irene Rosenfeld, Kath Herrera y Elena Girjoaba, al pie de la discoteca La Gallera, en la ciudad de Tena.
Foto: Cortesía de Plash / El Telégrafo
06 de mayo de 2018 - 00:00 - Marco Antonio Piza

Todo es una locura con Plash, banda femenina de rock clásico. En la psicología de sus cuatro integrantes, lo más loco puede parecer algo cuerdo; y lo que es normal, quizás esté fuera de foco.

Como el hecho de no tener una batería a pocos minutos antes de su show. Eso les sucedió mientras se preparaban en el escenario para el Chibunga Rock Fest en Riobamba, en la noche del viernes 27 de abril.  

Los tambores fueron trasladados a un segundo escenario para otra presentación del mismo evento. Pero no hubo complicación, las chicas esperaron con la mejor vibra a que la batería vuelva. Y así sucedió.

Una vez “armadas”, Plash conquistó con puro rock a un público sediento de mover melenas, cabezas, brazos y  todas las extremidades posibles y no posibles con temas como “Born to be wild”, “Road House Blues”, “One way or another”, un medley de Queen, y otros.

Plash, fundado y dirigido por Irene Rosenfeld (baterista), ya está acostumbrado a estas lides. En el último feriado de abril viajó a tres ciudades: Riobamba (27), Tena (28) y Coca (29).

Todo eso en 72 horas y 1.000 kilómetros de recorrido por las carreteras del país, que si hablaran, quizás hasta les agradecerían por cantarles mientras viajan, ablandando y hasta fundiendo el asfalto.

La aventura rockera comenzó el 27 de abril en el bar La Tokata, de Quito. Ese fue el punto de encuentro, con la cantante Elena Girjoaba e Irene, quienes dieron el visto bueno al conductor para salir.

Y comenzó la fiesta. Se dirigieron al sur para recoger a Kath Herrera (guitarrista) y Giss Chacón (bajista). Cuando todas encuentran la alegría se suma sin dudar. Pero hay otro integrante, Krix Yánez, que bien podría ser “el quinto Plash”.

Yánez es su productor, músico y sonidista, que las acompaña en los viajes, y hasta toca con ellas un fascinante cover de “Beds are burning” en vivo. Llegaron a Riobamba a las 17:00. Para el almuerzo, unas pizzas fueron suficientes, pues había un show que cumplir.

Desde la izquierda: Irene Rosenfeld (batería), Elena Girjoaba (cantante) y Kath Herrera en la guitarra eléctrica durante su presentación en Tena. Cortesía MikrotextDesde la izquierda: Irene Rosenfeld (batería), Elena Girjoaba (cantante) y Kath Herrera en la guitarra eléctrica durante su presentación en Tena. Foto: Cortesía Mikrotext

El Chibunga Rock Fest se realizaba en el parque Ricpamba y el público ya estaba algo encendido, pero querían más. “Ya llegó Plash, vamos a verlas”, comentaban animados los asistentes.  

Su presentación fue una fiesta sin límites. Giss se hirió el dedo y sangró un poco. Así, tocó su instrumento con energía y hasta cantó “Come on let’s go”, en la versión de Los Lobos.

La banda interpretó “Castillos de arena”, tema inédito. Luego vino la euforia. Sus fans pedían selfies sin parar, cual rockstars.  

Viaje por Tena y Coca

El viaje continuó en la medianoche. La miniván tomó la vía de Ambato, Baños y Puyo en la madrugada, hasta que la capital de Napo apareció en el amanecer del sábado.

Al llegar, un descanso breve, porque el show era en la noche en la disco La Gallera.

La agenda es apretada: en  la tarde entrevista en Radio Arco Iris y, de inmediato, a la prueba de sonido. Cuando el atardecer saludaba, conocieron el puerto de Misahuallí, una iniciativa de Krix, pues manifestó que en las giras es poco el tiempo para hacer turismo.

Ya en la noche, el público de La Gallera se divertía al son de la música urbana, la mayoría  bailando, sin imaginar la dosis de rock que se les venía.    

Plash apareció de improviso frente a una audiencia que al inicio parecía gustar solo los temas de moda. Sin embargo, la potente voz de Elena hipnotizó al público; Todos empezaron a animarse in crescendo, hasta cantar y terminar con una ovación, convirtiéndose en nuevos fans. En ese recital tocaron “La mala del rock”, otra de sus melodías.

El recorrido continuó el domingo en Coca, en el Jungla Fest, evento organizado por sus festividades.

El turno de Plash fue en la noche. Y otra vez cumplió su misión, conectó con el público que terminó saltando y bailando al pie de la tarima.    

El periplo llegaba a su fin en el regreso a Quito desde Coca. Y sucedió lo inesperado, la furgoneta se quedó sin gasolina a 40 minutos de Archidona. El amanecer consiguieron combustible para retomar el viaje. Llegaron a la capital casi al mediodía.  

¿Próximo destino?... las Galápagos, pues que se preparen las “Islas Encantadas”.

Es que todo es una locura con Plash, porque hasta la cordura más sana necesita vacaciones, o quizás irse en una gira de rock. (I)

Para estar siempre al día con lo último en noticias, suscríbete a nuestro Canal de WhatsApp.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media