Después de casi tres meses de iniciada, la campaña electoral ya se ha perfilado a los más opcionados a ocupar el sillón presidencial. Keiko Fujimori, inamovible en el primer lugar, tiene el 34,6% del apoyo nacional, la tercera parte del electorado. Su sólido porcentaje incluso meses antes de iniciada la campaña, parece asegurarle su paso a la segunda vuelta.

Quién la acompañe, de acuerdo a los sondeos recientes de Ipsos-Perú y CPI, saldrá de la pugna entre Pedro Pablo Kuczynski (15%), Alfredo Barnechea (11,3%) y Verónica Mendoza (10,9%). Todos son candidatos que en las últimas semanas se han posicionado en el imaginario colectivo como alternativas sólidas para llegar a la presidencia. Los exmandatarios Alan García (6%) y Alejandro Toledo (1%), están entre los rezagados del proceso.

Estas posiciones también se traducen en el nivel de preferencias que los candidatos al Congreso. De acuerdo a la medición de CPI, un 21,4% de las preferencias apunta a la elección de congresistas de Fuerza Popular, tienda política de los Fujimori. De materializarse esta inclinación, el próximo Congreso estaría compuesto por una mayoría absoluta de 70 parlamentarios fujimoristas, condición que, en el caso de que Keiko fuese electa presidente, convertiría al Parlamento en una aplanadora.

Es conocida la resistencia que la tienda fujimorista tiene frente a la unión civil entre personas del mismo sexo, el aborto en casos de violación, la defensa de derechos laborales, la reinserción del Estado en la administración de servicios públicos, entre otros temas de debate nacional.

Con apenas 19 curules, el partido político de Kuczynski sería la segunda fuerza política, seguida por los 14 escaños de Acción Popular, tienda de Barnechea, y por las 9 plazas que el aprismo, en su alianza con la derecha, lograría en esta contienda.

El panorama sería más conflictivo si Fujimori no mereciera el respaldo popular. Kuczynski, Barnechea o Mendoza tendrían que dirigir un gobierno enfrentado por una firme oposición en el Congreso, capaz de impedir cualquier reforma.

Kenji Fujimori, el más opcionado

En Lima, epicentro de la vida política del país, los congresistas más mencionados por la población pertenecen, la mayoría, al fujimorismo. -Kenji Fujimori, hermano menor de Keiko, aparece como el personaje que más votación recibiría en los comicios del próximo 10 de abril. Este último se libró de una acusación de entregar dinero en la campaña, una práctica prohibida.

De esta forma, el panorama electoral se configura a escasos días de que más de 20 millones de peruanos acudan a las urnas para apostar por su futuro. Las elecciones generales en el vecino del sur serán el domingo 10 de abril. (I)

MÁS DESERCIONES

La lista de aspirantes presidenciales se redujo ayer a poco más de la mitad de los 19 originalmente inscritos, con los retiros de los postulantes de Solidaridad Nacional, Hernando Guerra-García; y del grupo Perú Nación, Francisco Diez Canseco. Ambos tenían posiciones marginales en las encuestas.

Las renuncias buscan preservar el registro electoral de los partidos de los aspirantes para futuros comicios, pues no tenían las posibilidades de mantenerla porque para ello necesitaban al menos 5% de los votos, nivel que no alcanzaban.

Por razones similares abandonaron antes la contienda Yehude Simon (Partido Humanista), Vladimir Cerrón (Perú Libertario), Renzo Reggiardo (Perú Patria Segura) y Felipe Castillo (Siempre Unidos).

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Visitó comunidad indígena

Mendoza promete ordenamiento territorial

La candidata presidencial del progresista Frente Amplio de Perú, Verónika Mendoza, aseguró que, de ser elegida, reconocerá los derechos de las comunidades indígenas y campesinas y desarrollará una política para apoyarlas.

La postulante hizo la declaración en una visita a Andahuaylillas, su pequeño pueblo natal, en la región surandina de Cusco, a donde llegó en su campaña electoral
con miras a las elecciones generales del 10 de abril.

Señaló que el reconocimiento de los derechos de las comunidades nativas y agrarias formará parte de un proceso nacional que incluye el ordenamiento territorial, es decir, la delimitación de espacios para distintas actividades económicas.

También el respeto a los territorios ancestrales y los recursos comunales, la incorporación de mecanismos de representación política de los indígenas en los diversos niveles del Estado y medidas de emergencia para pueblos originarios en aislamiento voluntario.

Mendoza prometió el impulso a la enseñanza de las lenguas y conocimientos originarios con programas de educación bilingüe intercultural, su especialidad como educadora.

La candidata fue recibida en el pueblo donde vivió en su infancia y se reunió con sus familiares y compartió con ellos un desayuno preparado con maíz, quinua y otros productos andinos. En un diálogo con jóvenes lugareños señaló la necesidad de revalorizar el patrimonio cultural y desarrollar el turismo. (I)